Introducción: un problema muy común que requiere atención
El dolor lumbar es una de las molestias más frecuentes en la población adulta. Puede aparecer tras realizar un esfuerzo, mantener una mala postura o como consecuencia de una lesión más seria.
Saber distinguir entre una simple sobrecarga y una lesión ortopédica es fundamental para actuar a tiempo y evitar complicaciones. En Sanicor, expertos en ortopedia y rehabilitación, te explicamos cómo identificar las diferencias y qué pasos seguir para aliviar el dolor y cuidar tu espalda.
1. Qué es el dolor lumbar y por qué aparece
El dolor lumbar se localiza en la parte baja de la espalda, justo por encima de los glúteos. Esta zona soporta buena parte del peso corporal y participa en casi todos los movimientos del cuerpo, por lo que es especialmente vulnerable.
Las causas más comunes incluyen:
Sobrecargas musculares por esfuerzo físico o malas posturas.
Lesiones ortopédicas como hernias, contracturas graves o problemas articulares.
Sedentarismo, debilidad muscular o falta de movilidad.
Estrés y tensión, que pueden aumentar la rigidez muscular.
(Foto sugerida: ilustración anatómica de la zona lumbar con señalización de músculos y vértebras)
2. Sobrecarga lumbar: una molestia habitual pero temporal
La sobrecarga lumbar ocurre cuando los músculos de la espalda trabajan en exceso o se tensan más de lo habitual. Es una causa frecuente de dolor leve o moderado y, en la mayoría de los casos, no implica daño estructural.
Síntomas de una sobrecarga lumbar
Dolor difuso, sin un punto exacto.
Rigidez o sensación de “tirantez” en la zona baja de la espalda.
Dolor que mejora con el reposo y el calor local.
Ausencia de hormigueo o pérdida de fuerza.
Cómo actuar ante una sobrecarga
Descansa durante uno o dos días, evitando movimientos bruscos.
Aplica calor local para relajar la musculatura.
Realiza estiramientos suaves y progresivos.
Si el dolor persiste más de cinco días, consulta a un especialista.
3. Lesión ortopédica lumbar: señales de alarma que no debes ignorar
Cuando el dolor lumbar es más intenso o prolongado, puede deberse a una lesión ortopédica. Estas lesiones afectan a las estructuras óseas, articulares o musculares, y suelen requerir una valoración médica y tratamiento específico.
Ejemplos de lesiones ortopédicas comunes
Hernia discal.
Protusión lumbar.
Contractura severa o desgarro muscular.
Artrosis o pinzamiento vertebral.
Síntomas que indican una posible lesión ortopédica
Dolor localizado y persistente, incluso en reposo.
Hormigueo, adormecimiento o debilidad en piernas o glúteos.
Dificultad para moverse, agacharse o mantenerse de pie.
Dolor que se irradia hacia una pierna (ciática).
En estos casos, es importante no automedicarse ni forzar la zona. Acude a un profesional para una valoración completa. En Sanicor, contamos con especialistas que pueden orientarte hacia el tratamiento y las ayudas ortopédicas más adecuadas.
4. Cómo distinguir entre sobrecarga y lesión ortopédica
Para saber si tu dolor lumbar es una simple sobrecarga o una lesión, observa los siguientes criterios:
| Característica | Sobrecarga lumbar | Lesión ortopédica |
|---|---|---|
| Inicio del dolor | Tras esfuerzo o mala postura | Puede aparecer de forma brusca o progresiva |
| Tipo de dolor | Difuso, mejora con reposo | Intenso, localizado, no mejora con el reposo |
| Duración | Pocos días | Más de una semana o recurrente |
| Síntomas asociados | Rigidez o molestia | Hormigueo, debilidad o dolor irradiado |
| Necesidad de atención médica | No siempre | Recomendable y necesaria |
(Foto sugerida: tabla comparativa visual entre sobrecarga y lesión, con ilustraciones simples de la espalda)
5. Prevención y cuidados para evitar el dolor lumbar
Adoptar buenos hábitos posturales y cuidar la musculatura de la espalda es la mejor forma de prevenir el dolor lumbar.
Consejos prácticos
Mantén una postura erguida al estar de pie o sentado.
Evita cargar peso de forma brusca o con la espalda encorvada.
Realiza ejercicios de fortalecimiento lumbar y abdominal.
Utiliza sillas con apoyo lumbar adecuado.
En casos de debilidad o recuperación, considera el uso de una faja lumbar ortopédica para estabilizar la zona.
6. Cuándo acudir a una ortopedia o especialista
Debes acudir a un profesional cuando:
El dolor persiste más de siete días.
Aparecen hormigueos o pérdida de fuerza.
El dolor aumenta al caminar o al estar en reposo.
Has sufrido una caída o esfuerzo intenso reciente.
En Sanicor, nuestros especialistas pueden ayudarte a identificar la causa del dolor y ofrecerte soluciones personalizadas: desde fajas lumbares y correctores posturales, hasta productos de apoyo y rehabilitación diseñados para proteger tu espalda.
Conclusión: escucha a tu cuerpo y actúa a tiempo
El dolor lumbar puede tener muchas causas, pero reconocer si se trata de una sobrecarga muscular o una lesión ortopédica es clave para evitar complicaciones.
Escuchar las señales de tu cuerpo, mantener buenos hábitos posturales y contar con asesoramiento profesional son los mejores pasos hacia una recuperación segura.
En Sanicor, te ofrecemos productos, asesoramiento y acompañamiento especializado para aliviar el dolor lumbar y proteger tu bienestar diario.




