¿Cuándo y por qué usar medias de compresión?

Las medias de compresión terapéuticas son el tratamiento no quirúrgico más eficiente para tratar la insuficiencia venosa crónica. Están confeccionadas con fibras elásticas que ejercen una presión controlada y decreciente desde el tobillo hacia la parte superior de la pierna con una acción terapéutica probada. La compresión en el tobillo es mayor (100%) y va decreciendo a medida que nos acercamos a la zona inguinal. Esto ayuda a impulsar la sangre de nuevo hacia el corazón, favoreciendo de esta forma el retorno venoso.

Es importante saber que las medidas de compresión terapéuticas no son lo mismo que las medidas de descanso, aunque muchas personas las confunden. Las medias de compresión terapéuticas son productos sanitarios de eficacia probada avalados por la evidencia científica para tratar los problemas circulatorios, mientras que las medias de descanso no tienen ninguna eficacia terapéutica y son únicamente una prenda de vestir o moda.

Entonces, ¿cuándo debo usar medias de compresión?

Hay diversas situaciones que pueden requerirlas y que citamos a continuación:

  • En caso de enfermedad venosa crónica con diferentes signos y estadios,  como las telangiectasias o varices reticulares, varices, edema o úlceras.
  • Prevención de úlceras o trombosis.
  • Edemas, edemas postoperatorios y postraumáticos.
  • En el tratamiento de úlceras varicosas.
  • Para aquellas personas que han tenido una cirugía venosa.
  • Para personas que deben pasar mucho tiempo de pie sin moverse debido a su trabajo.
  • Para mujeres embarazadas que notan la aparición de varices u otros signos.

¿Qué tipos de compresión existen?

Es el grado de la enfermedad venosa el que determina la compresión médica necesaria para cada persona. Aunque existen diferentes clasificaciones, existen cuatro clases de compresión diferentes que son las más habituales: Suave o clase I, media o clase II, fuerte o clase III y muy fuerte o clase IV.

Para los casos de fatiga en las piernas, mujeres embarazadas, quienes no se han movido durante mucho tiempo (de pie y sentados) o para la aparición de varices,  se recomienda usar medias ligeras o de compresión media.

Las medias de compresión fuertes o muy fuertes son adecuadas para enfermedades vasculares graves, lipedemas y linfedemas y por lo tanto deben ser recetadas por un especialista. 

¿Qué tipos de medias de compresión hay?

En cuanto a la altura de la media, ésta debe quedar siempre por encima de la parte afectada. Hay 4 tipos:

Media corta: Son medias por debajo de la rodilla. 

Media larga AF: Son medias largas  que llegan hasta la mitad del  muslo.

Media larga AG: Son medias largas que llegan hasta la raíz del muslo.

Panty: Son medias hasta la cintura. Pueden ser de una sola pierna o para las dos piernas. También existen versiones específicas para hombre.

Por otro lado, puedes elegir diferentes formas ( blondas, punteras abiertas y cerradas), tejidos de distinto grosor y texturas y una gran variedad de colores que hacen las medias cada vez más estéticas con numerosas tendencias de moda y colecciones con atractivos colores que cambian cada temporada.

Podemos proporcionarte tus medias en multitud de tallas, anchos y alturas y también a medida, siempre bajo un sistema de medición profesional y fiable.

También existen medias para la prevención de trombosis en viajes de larga duración, medias para compresión deportiva o medias con alto contenido en algodón.

 

¿Cómo usar y cuidar las medias de compresión?

 

Las medias siempre se deben colocar por la mañana, nada más levantarse y se quitan de noche, a no ser que se trate de medias especiales para uso nocturno. 

Para colocar tus medias es importante que la piel esté seca y debes seguir los siguientes pasos:

  • Da la vuelta a la media hasta el talón.
  • Seguidamente, introduce el pie y tira de la media hacia arriba en dirección al talón y ajústalo.
  • Sigue subiendo la media por etapas y repartiendo el tejido regularmente. Una vez puesta, ajusta la media para quitar las arrugas que se hayan podido formar. 
  • Nunca tires del borde superior o la liga, ya que podría deformarse. Puedes usar guantes de goma específicos y calcetines de colocación o pone medias que te ayudarán a colocarlas de forma fácil y correcta.

Así mismo, son recomendables los masajes diarios con geles refrescantes o cremas para el cuidado de la piel que mejoran la hidratación, el equilibrio y bienestar de la piel.

Para el cuidado de tus medias, usa detergentes líquidos suaves a mano o a máquina con bolsa de lavado a la temperatura indicada. No uses suavizantes ni blanqueadores, ya que podrían afectar al tejido, afectando su acción terapéutica. Lávalas preferentemente a mano, sin retorcer el tejido y deja secar al aire, alejadas de fuentes de calor directo.

Si tienes alguna consulta sobre medias de compresión, ponte en contacto con nosotros.

Preguntas Frecuentes

  1. ¿Cómo afectan las diferentes estaciones del año al uso de medias de compresión? Las medias de compresión pueden ser más cómodas de usar en estaciones frías, pero también hay versiones transpirables y ligeras para el verano, ayudando a mantener el confort sin reducir su eficacia.
  2. ¿Existen medias de compresión específicas para deportistas y cuáles son sus beneficios? Las medias de compresión para deportistas están diseñadas para mejorar la circulación durante el ejercicio, reducir el riesgo de lesiones, y disminuir el tiempo de recuperación muscular, ofreciendo soporte específico según el deporte practicado.
  3. ¿Qué indicaciones especiales deben seguirse al usar medias de compresión durante el embarazo? Durante el embarazo, es recomendable usar medias de compresión específicas que ayudan a prevenir la hinchazón de pies y piernas y reducen el riesgo de varices, siempre ajustadas a las necesidades y cambios del cuerpo de la mujer embarazada.

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